Las organizaciones que implementan nuevos sistemas ERP/CRM ganan más dinero en un período de implementación corto en comparación con los grandes descuentos en los servicios de implementación. Sin embargo, ¡muchas empresas aún se concentran en obtener sus descuentos! Entonces, ¡es hora de un cambio!

Durante la implementación de un software, las empresas tienen que lidiar con costes adicionales. Los usuarios esenciales son (parcialmente) eliminados de su función. Como resultado, sus procesos centrales están bajo presión y hay que contratar capacidad adicional para continuar con el trabajo habitual. Además de eso, hay costes dobles de mantenimiento y administración del sistema tanto en hardware como en software para el sistema antiguo y el nuevo y, por último, el ausentismo por enfermedad a causa del estrés muchas veces es mayor de lo normal.

Por lo tanto, esperaría que las organizaciones hagan todo lo posible para mantener este período lo más corto posible. ¡Pero eso no es lo que sucede! Cuando se ejecuta la implementación, la velocidad a menudo no tiene ninguna prioridad y, peor aún, el uso operativo de la nueva solución de software se pospone durante meses sin dudarlo o incluso levantándolo durante los períodos de vacaciones.

¡Pero por lo tanto necesita una actitud diferente durante las negociaciones! No pidas descuentos en los servicios, porque entonces obtendrás consultores mediocres o incluso junior. Si bien hay un retorno rápido de los honorarios más altos de los consultores senior, ya que pueden evitar un retraso en el inicio del uso operativo. Pídele a tu vendedor que no pague sus descuentos en efectivo (menor inversión) sino en días extra de asesoría. Además de la cantidad de días, ya han ofrecido. ¡Eso le dará a tu proyecto un impulso de calidad! También puede considerar ofrecer a su proveedor una tarifa adicional por cada semana que la implementación finalice antes de la planificación. ¡Manteniendo la calidad, por supuesto!

La compra inteligente de servicios de implementación no se trata del precio más bajo. Se trata del impacto en la calidad y la duración del período de implementación.